El Girona sigue sin levantar cabeza, más allá de merecimientos. Los catalanes cayeron en el Coliseum a costa del Getafe tras los goles de Mario Martín y Mayoral, que decantaron la cita en el segundo tiempo.
A priori, Míchel ordenó el once de gala en un partido donde la mentalidad colectiva y el trabajo en los duelos iba a ser clave para llevarse el partido. Frente a los visitantes, un cuadro azulón con un 4-4-2 muy marcado, reforzando sus bandas y minimizando los errores para no dar vida al rival.
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El Getafe ganó (2-1) al Girona en la noche más terrorifica del año para los de Michel.
Las porterías imbatidas durante el primer tiempo mostraron la lógica de unos primeros 45 minutos donde los guardametas apenas tuvieron que intervenir. Tan solo una intervención de Gazzaniga sin peligro y una de David Soria –ésta sí comprometiendo a los azulones tras un buen disparo de Joel Roca– fueron la clara muestra de que el partido estaba dispuesto a decantarse en los detalles, tal y como sucedió en la última ocasión que los ‘gironins’ visitaron el Coliseum.
En aquella ocasión, el tanto de Yangel Herrera, disfrazó a los catalanes de muro cuando más sufrieron por la permanencia. Esta vez, pasó algo similar, con un equipo mentalizado en echar el cerrojo y salir al contraataque con balones a Vanat. Ambos equipos se tantearon, pero siempre aparecieron piernas rivales que lo taparon todo en cualquiera de las áreas.
Más apretaron los de Bordalás en el segundo tiempo, acosando en campo rival con tres hombres de refresco –Abqar, Mario Martín y Sancris– que dieron algo más de soltura al equipo. Aun así, se repitió la tónica. Piernas y piernas en unas buenas labores defensivas y, todo ello, acompañado de las salidas de Ounahi: calidad y desparpajo a raudales.
Sin embargo, con el paso de los minutos, el Getafe también sacó a relucir a su mejor golpeador. Luis Milla, acompañado de su guante en la bota, botó la enésima acción a balón parado hasta conectar con la testa Mario Martín (72’). El remate, perfecto, puso por delante a los azulones, quienes aprovecharon la euforia para seguir con la tendencia alcista.
Míchel respondió y agitó el árbol en ataque, con Stuani y compañía. La respuesta llegó por parte de Vanat, aunque no supo definir como tiene acostumbrado al respetable de Montilivi. Nada más lejos de la realidad, un nuevo centro dobló la ventaja para los azules a pocos minutos del final.
Fue Mayoral, quien remató a trompicones al segundo palo para doblar la ventaja y otorgar el tanto de la tranquilidad en una nueva noche negra del Girona (86’). La calidad rebosa, pero no los goles ni las situaciones de peligro ofensivo.
Tocando el descuento, el VAR llamó al colegiado para revisar una acción en la que Duarte amarra a Stuani en el área. El charrúa, sin extrañar a nadie, volvió a acudir a su cita con el gol, engañando a Soria. (90’ +3). De todos modos, ya no hubo tiempo para una reacción ‘gironina’ que sigue dejando al equipo colista con una victoria en once jornadas. El Getafe, con su segunda victoria consecutiva, mira hacia Europa con su sexto puesto.